La historia de un Maratón

Hola a todos, han pasado varios días sin haber publicado un artículo, pero tengo una muy buena razón para ello!

Fui invitado por mi papá a ver la 40va edición del Maratón de Nueva York, y este era un maratón especial, no porque fuese la edición 40, sino porque mi hermana y su esposo estaban corriéndolo, y esta es la historia que quiero compartir con Uds hoy.

He escrito en el pasado sobre el poder de una decisión y sobre el poder de tener un sueño, y esta historia sigue ese camino...

Mi hermana y su esposo (De ahora en adelante referidos como Los Corredores) tomaron una decisión hace unos 6 meses atrás de correr el Maratón, y por supuesto siempre estuvo en sus mentes terminarlo.

Trabajaron muy duro, corriendo de 4 a 5 veces por semana, levantándose antes de la 5am para correr, y después de correr comenzar su día normal de ir al trabajo... Definitivamente una prueba de disciplina para mantenerse en un régimen así por tanto tiempo... Pero acá está la clave... Tenian un sueño sobre el cual tomaron acción.

Después de meses de preparación, finalmente llega el día de la carrera. Un maratón son 42km (26 millas), y lo más largo que entrenaron fue 35km (22 millas).

La carrera comenzó y por supuesto que hicimos nuestro mejor esfuerzo para poder verlos en diferentes puntos y darles ánimo, Los Corredores hicieron tiempos diferentes, pero ambos terminaron.

Luego del Kilómetro 28, sus cuerpos dijeron "Se acabó, no puedo seguir", y su mente dijo "Yo me preparé para esto, sé que puedo llegar al final"... ¿Se atreven a adivinar quién ganó?

Nuestra mente es nuestro activo más valioso, sólo tenemos que entrenarlo para soportar cualquier obstáculo que se le presente.

Luego de terminar, luego de las lágrimas de alegría y de orgullo, ambos nos dijeron que terminaron a pesar de sus propios cuerpos, se aferraron a cosas más grandes que ellos, se aferraron a sus sueños... Terminar el maratón de Nueva York. No había otro posible final a la historia.

Los Corredores ofrecieron un kilómetro por la familia, uno por los amigos, uno por aquellos que ya no están con nosotros, y kilómetro tras kilómetro, terminaron el recorrido.

Quiero rendirle tributo a aquellos que se atrevieron, aquellos que hicieron posible los imposible sólo por la fortaleza de sus deseos, el enfoque láser y al sobreponerse a todas las excusas posibles para parar, para rendirse, para entregarse.

A mi hermana y su esposo, a Los Corredores y a todos los corredores del Maratón... Me quito el sombrero, les agradezco, los reconozco, Uds. me inspiraron a mí y a muchos otros.

Nuestros sueños en la vida son nuestro maratón, mi invitación para Uds hoy es a hacer el compromiso de terminarlo, no dejes que el dolor te haga parar, no dejes que el agotamiento te inhiba de vivir ese preciado momento de cruzar la meta, alzar los brazos al cielo y decir "Misión Cumplida"

Lore y Osmar, Los amo!!! y a la voz de "Vas bien!!!!!", y "Buen trabajo Corredores!!!"... Les agradezco.

Hasta la próxima.

Federico Ruiz